Elde Gelos “Cada libro tiene una marca de vida propia”

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Charla sobre el fotolibro Latinoamericano.

 

En el marco del Festival Internacional de Fotografía de Valparaíso (FIFV), este viernes 8 de noviembre en el Zócalo del Centex, se llevó a cabo una charla sobre el Fotolibro en Latinoamérica a cargo de la fotógrafa argentina Julieta Escardó y el fotógrafo español Miguel Ángel Felipe.

Julieta Escardó es fotógrafa, editora y docente de fotografía contemporánea. Desde 2002 dirige la Feria de Libros de Fotos de Autor y trabaja como fotógrafa freelance. Es codirectora de la Editorial La Luminosa.

Miguel Ángel Felipe,  fotógrafo y periodista más conocido por el  heterónimo Elde Gelos, fundador de la agencia IMA en Santiago de Chile, quien es docente de la Escuela de Fotografía Alpes, imparte regularmente cursos y talleres en varias universidades. Es también cofundador de Humo -junto al editor chileno Miguel Ángel Larrea-, una iniciativa para el desarrollo de proyectos fotográficos. En la actualidad trabaja como editor gráfico del periódico Las Últimas Noticias y dirige el sello independiente Ediciones La Visita.

En está ocasión ambos autores se adentraron en una reflexión sobre los distintos caminos que conllevan la producción del fotolibro. Generando una ávida discusión acerca de los medios de difusión, la circulación, los formatos, la edición y el valor del fotolibro como objeto y como también el de su valor emocional.

En base a los distintos formatos que hoy priman sobre la fotografía,  se discutió acerca de las versiones físicas y  virtuales  de ésta “Algo que ocurre con el libro físico, como no ocurre en los virtuales, es que en el libro físico actúa en el mismo tiempo en el que está situado el espectador, envejece, se mancha, se dobla, se arruga con nosotros, cada libro tiene una marca de vida propia” argumentó Elde Gelos.

En cambio, Julieta Escardó argumentó que el valor de los libros se debe regir frente a la  circulación libre que entrega la democratización virtual del fotolibro, apelando a que éste como objeto, carece de valor en cuanto a la adquisición y el valor del fotolibro sea regido  bajo las  estrategias que impone el mercado.

 

Por Rocío Olmos de Aguilera